Memorias mamá prematura

La Idealización de la Prematuridad: Analizando la narrativa de una Realidad Compleja

La prematuridad, definida como el parto antes de las 37 semanas de gestación, afecta cada año a millones de bebés y sus familias en el mundo. Sin embargo, más allá de los avances médicos y los aspectos clínicos, la narrativa social que rodea a la prematuridad ha ido cambiando de un enfoque de invisiblización a cierta visibilidad pero solo romantizada, configurándola como historias épicas de lucha y resiliencia.

Si bien en cierto que esta narrativa la incorporamos las propias familias como modo de sobrevivir y darle un significado a lo vivido, también están moldeadas por el contexto sociocultural, por el arquetipo del “viaje del héroe”, propuesto por Joseph Campbell y ampliamente reconocido en la literatura, mitología y cultura popular.

En este artículo exploro cómo la prematuridad ha sido romantizada en distintos niveles y cómo esta idealización puede tener consecuencias negativas tanto para las madres y padres como para los neonatos. Asimismo, busco un equilibrio crítico, entre reconocer historias de esperanza y resiliencia, no minimizando las complejidades y dificultades que conlleva la experiencia de la prematuridad.

La Idealización de la prematuridad

1. ¿Qué se Entiende por idealización de la Prematuridad?

La idealización de la prematuridad ocurre cuando se asocia el nacimiento prematuro con una narrativa emocional simplificada, centrada en la idea de «triunfar» o «luchar», con un énfasis excesivo en los casos exitosos o «milagrosos», presentando la experiencia de la prematuridad como algo que fortalece a las familias sin abordar adecuadamente sus desafíos, altibajos, «fracasos» o fallecimientos inherentes.

Entre los elementos característicos de esta romantización están:

  • La representación del bebé como un «luchador/a» que «vence todas las probabilidades».
  • La narrativa de «las madres y/o padres como héroes y heroínas» cuya fortaleza emocional trasciende cualquier dificultad.
  • La minimización de los impactos a largo plazo tanto médicos como psicológicos de la prematuridad.

Si bien estas historias son «parte de la realidad» y pueden actuar como fuentes importantes de esperanza e inspiración, su predominancia puede desdibujar la realidad de muchas familias y promover expectativas irreales.

2. Factores que Contribuyen a la idealización de la Prematuridad

La romantización de la prematuridad no surge de manera aislada; es el producto de múltiples influencias sociales, culturales y médicas. A continuación, se detallan las principales.

2.1. Representaciones Mediatizadas

Las historias de bebés prematuros superando adversidades de forma «casi milagrosa» son comunes en medios tradicionales y plataformas digitales. La imagen de un bebé que, contra todo pronóstico, crece «sano» y feliz después de un inicio tan desafiante, es poderosa y emotiva. El bebé más pequeño en España que ha conseguido sobrevivir con 393 gramos. PD: os reto a buscar y leer las noticias sobre prematuros para ver si hablan sobre el «después».

Sin embargo, esta narrativa puede eclipsar la experiencia de las familias cuyo recorrido no está marcado únicamente por momentos de resiliencia, sino también por problemas de salud crónicos, discapacidades permanentes y un estrés emocional significativo.

2.2. Redes Sociales y Cultura de la Superación Personal

Las redes sociales han amplificado la idealización de la prematuridad. Historias acompañadas de fotos de bebés diminutos en sus incubadoras con mensajes como «pequeño pero fuerte» o «un gran luchador en un cuerpo pequeño» reciben miles de interacciones y respuestas emocionadas. Aunque estas publicaciones sirven para visibilizar la prematuridad, también fomentan una narrativa idealizada que no refleja «toda» la realidad.

3. La Prematuridad en el Contexto del Viaje del Héroe

3.1. La llamada a la aventura

Para la madre y/o padre, la prematuridad genera una situación abrupta e inesperada que rompe con las expectativas del embarazo. La noticia de que el bebé nacerá antes de lo planeado o la experiencia de un parto prematuro extremo funciona como esta «llamada», que los fuerza a abandonar su idea de un embarazo “normal” y aventurarse en el desconocido mundo de la UCIN.

Simbología del cambio: El mundo conocido (el embarazo planificado) desaparece, y la pareja es lanzada a un universo lleno de incertidumbre, miedos y desafíos que incluye tecnologías médicas, términos médicos desconocidos y pronósticos imprevisibles.

3.2. El cruce del umbral

El ingreso a la UCIN actúa como el «umbral» que hay que cruzar. Este espacio se presenta como un terreno extraño y muchas veces intimidante para la madre y padre. Aquí, el bebé se enfrenta por primera vez a pruebas físicas (luchando por respirar, desarrollar fuerza y controlar su temperatura), mientras que la madre y/o padre aprenden a interactuar con su bebé en un entorno donde están rodeados de monitores y personal sanitario.

3.3. Los desafíos y aliados

En esta etapa, el bebé (el héroe principal de la narrativa) enfrenta pruebas y adversidades relacionadas con su supervivencia: superar el bajo peso, respirar sin asistencia, mantener la temperatura corporal y evitar infecciones. Las madres y/o padres “ayudan” al héroe a superar estas pruebas, convirtiéndose en figuras de apoyo afectivo.

El mentor/a: El personal sanitario asume, simbólicamente, el rol de mentor/a en esta fase del viaje, proporcionando orientación y cuidado para guiar tanto al bebé como a los progenitores hacia el éxito.

3.4. La transformación y el logro

Un punto crucial ocurre cuando el bebé alcanza hitos clave, como respirar sin ayuda, alimentarse por sí mismo o ganar peso suficiente como para salir de la UCIN. Este proceso se percibe como el “triunfo” del héroe, pero también como una transformación para la madre y padre, quienes emergen como una familia resiliente que superó un enorme desafío.

3.5. El regreso con el elixir

Al alta de la UCIN, las familias suelen ser celebradas como “supervivientes” de una experiencia extrema. La salida del hospital se presenta como un regreso triunfante a la vida cotidiana, con el «tesoro» (el bebé) a salvo y listo para enfrentar el futuro.

¿ Y nada más? Como el típico cuento de Disney «Fueron felices y comieron perdices»…. ¿Seguro?

Pues aquí surge un importante problema: aunque el modelo narrativo concluye en este punto, la vida de las familias no regresa automáticamente a la normalidad. En muchos casos, los bebés prematuros enfrentan complicaciones a largo plazo y las familias lidian con el trauma emocional y las responsabilidades de un ser humano con necesidades especificas y «atípicas». Este aspecto a menudo es omitido en la narrativa romántica. Evidentemente que cuando salimos de UCIN estamos en una «nube», sabemos la fortuna que tenemos de haber sobrevivido, vamos con una mochila cargada de experiencias y aprendizajes de todo tipo, pero después queda aún, un largo camino por delante, la parentalidad prematura, es decir, seguir viviendo la prematuridad después del alta e UCIN.

4. Consecuencias de la idealización de la prematuridad

4.1. Invisibilización del Dolor, el Trauma y la pérdida.

Las madres y los padres de bebés prematuros a menudo enfrentan altos niveles de estrés, ansiedad, depresión, y pueden desarrollar trastorno de estrés postraumático (TEPT) debido a la prematuridad. La idealización puede invalidar estos sentimientos, haciendo que se sientan que deberían «enfocarse en lo positivo» o que no tienen derecho a expresar su dolor. Además los bebés también tienen un fuerte impacto traumático y altos niveles de estrés que expresan de maneras diferentes a las persona adultas.

La narrativa heroica coloca el énfasis en siempre «el éxito y la superación», ignorando a las familias — que por ejemplo pierden a su bebé o cuyos hijos/as enfrentan discapacidades a largo plazo— se les aparta, pudiéndose sentir excluidas e incluso culpables por no cumplir con las expectativas de «triunfo».

4.2. Presión social parental: «ser fuertes»

Representar a la familia como héroes que no colapsan emocionalmente y que están constantemente al pie del cañón implica una carga extra de expectativas. Esta presión social puede llevar al agotamiento emocional, al sentimiento de inadecuación o culpa, especialmente cuando las madres y padres experimentan emociones que no encajan en el molde heroico, como frustración, tristeza, miedo o no logran encontrar esperanza inmediata en su situación.

4.3. Invisibilización de las realidades a largo plazo

Al igual que en muchas historias de héroes, el foco está puesto en el momento de la batalla y el triunfo inmediato, mientras que se minimizan (o se omiten por completo) las secuelas a largo plazo. En el caso de la prematuridad, estas incluyen desafíos médicos, educativos y socioeconómicos que impactan tanto al bebé como a su familia durante años.

4.4. Historias de Resiliencia Responsable

En lugar de retratar la prematuridad como una experiencia que inevitablemente termina en victoria, las narrativas públicas deberían incluir tanto historias de superación junto con los retos continuos, como las de pérdida. Esto puede normalizar los sentimientos difíciles y educar sobre la diversidad de resultados posibles.

5. Hacia una Narrativa Más Completa: Entre la Resiliencia y la vulnerabilidad

Para construir una narrativa más equitativa y comprensiva sobre la prematuridad, es necesario un enfoque que permita celebrar los momentos de esperanza y resiliencia sin minimizar las complejidades emocionales y médicas del proceso.

5.1. Validar todas las experiencias

Es fundamental reconocer que no todas las historias de prematuridad tienen desenlaces heroicos, y que incluso las consideradas «triunfos» implican sufrimientos y luchas. Validar todas las experiencias —desde los que pierden a su bebé hasta aquellos que enfrentan graves secuelas— es una forma de ofrecer apoyo inclusivo.

5.2. Humanizar más allá del arquetipo

Los bebés prematuros no son héroes en el sentido convencional, ni tampoco lo son las madres y padres. La narrativa debe centrarse más en la humanidad, en el apego, en el vinculo, en el impacto y en el cuidado que surge a pesar de las adversidades, sin la necesidad de romantizar o exaltar el sufrimiento.

5.3. Acompañar más allá del triunfo inmediato

Se debe dar más visibilidad a las realidades que enfrentan las familias después del alta de la UCIN. Estos desafíos cotidianos requieren el mismo nivel de empatía y apoyo que los primeros días.


6. Reflexiones Finales

La prematuridad, como experiencia, no necesita ser encajada en un arquetipo heroico o idealizado para ser comprendida y respetada. Aunque las historias de superación basadas en el viaje del héroe nos emocionan a tod@s, también simplifican una realidad profundamente compleja y llena de matices emocionales.

Entender estas experiencias desde una perspectiva más realista, completa y humana permite no solo apoyar mejor a las familias de bebés prematuros, sino también contribuir a un cambio social que valore tanto los momentos de fortaleza como las inevitables vulnerabilidades que atravesamos.

Y tú, mamá prematura, ¿Qué opinas? Compártelo en los comentarios 🙂

Bibliografia

  1. Campbell, J. (1993). El héroe de las mil caras. Fondo de Cultura Económica.
  2. Blencowe, H., Cousens, S., Chou, D., et al. (2013). «Born too soon: The global epidemiology of 15 million preterm births.» Reproductive Health, 10(Suppl 1), S2-S5.
  3. McGowan, J. E., et al. (2021). “Effects of Neonatal Intensive Care Unit Experiences on Parents: A Systematic Review.” Pediatrics and Neonatology, 62(3), 210-225.
  4. Sweeney, C. D. et al. (2019). «Understanding Parental Psychological Stress in Neonatal Intensive Care Units.» Journal of Perinatal Medicine, 47(5), 590-599.
  5. Stern, D. N. (2004). The Present Moment: In Psychotherapy and Everyday Life. W. W. Norton & Company.
  6. Romero, P. L. (2022). Narrativas y resiliencia en la prematuridad: Entre los héroes y la realidad. Editorial Ensamble.
  7. Landon, M. B. et al. (2020). «Short- and long-term outcomes of extreme prematurity.» Clinical Obstetrics and Gynecology, 63(2), 151-160.
  8. Arrebola, D. (2023). «El viaje del héroe: los 7 arquetipos o personajes de toda historia.» Mundos de Leyendas.

6 comentarios en “La Idealización de la Prematuridad: Analizando la narrativa de una Realidad Compleja”

  1. Soy mamá prematura, mi hija nació de 30 sdg pesando 1200grs, permaneció internada en UCIN 111 días, paso por todas las complicaciones que un bebé prematuro puede pasar. Hasta que logramos ir a casa.
    Hoy mi niña tiene 4 años pero seguimos luchando desde que salimos de Neo. La vida de un prematuro y su familia arrancan después del Alta de Neo. Y este artículo refleja a las claras todo lo que pasamos como padres, en nuestro caso, cómo familia visivilizamos todo en nuestra niña, lo bueno lo malo, lo no tan bueno y los grandes avances, porque no todo es color de rosa. La lucha es diaria y hay que seguir para que nuestros pequeños héroe puedan lograr avanzar en los hitos del desarrollo, a nivel motriz, neurológico, social.
    El camino no es fácil, nos caemos, nos levantamos, sufrimos ante cada diagnóstico, hay que seguir y seguir pero también permitirnos caer, para levantarse más fuertes. Y no dudemos en pedir ayuda profesional, eso nos ayudó muchísimo cómo familia. Pero es tal cual como refleja cada uno de los items de este artículo. Gracias por compartirlo.

  2. Laura Iruela martin

    Mi bebe nació prematuro tardío de 34 semanas. Hoy tiene 16 meses y aunque ahora esta perfecto los primeros meses fueron muy duros. Pasamos 20 días ingresados, acompañados en todo momento pero al darnos el alta algo no iba bien.muchas visitas al pediatra con las mismas respuestas(igual la mamá tiene depresión post parto, es normal las inseguridades al ser mamá primeriza…..). Hizo falta que mi bebé se desmayara para que le hicieran mil pruebas y detectasen que llevaba meses con reflujo oculto sin hacernos ni caso. Tras el alta hay otro mundo muy dificil

  3. Mi niña nació prematura hace 6 años ( nacida a las 30 semanas ) ,me encantó tu artículo, muy realista . Pienso que la idealización de la prematuridad puede deberse a un mecanismo de defensa, de protección que los mismos padres creamos . Hasta la fecha aún lidiamos con pequeñas secuelas a largo plazo ( problemas respiratorios ) pero por ningún lado he encontrado bibliografía referente a la prematuridad años después , como lidiar emocionalmente con ellos, porque a mí, personalmente, es un tema que me resulta muy difícil de procesar y eso que han pasado varios añitos. Muchas gracias.

    1. Muchas gracias 🙂 Si también puede ser mecanismo de defensa como bien dices. Con respecto a lidiar emocionalmente con ellos hay un libro que quizas pueda ayudarte. Entre la fuerza y lo vulnerable. Acompañamiento a los hijos prematuros desde el parto a la adolescencia de Pedro Valentin-Gamazo. Fue un padre prematuro también. Un fuerte abrazo

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